
© Claire Iberson
Tandle Hills
De parques concurridos, espacios de juegos y clubs infantiles, a campo abierto, hierba desbocada y cielo y espacio. Tandle Hills ha sido y seguirá siendo nuestro santuario. Los niños necesitan espacio, tiempo y juego sin límites y poder jugar sin las normas de la casa, de los adultos ni del mundo que les rodea. Cuando la situación acabó desbordándose, fue esa nuestra medicina.